Colombia: si es posible adoptar aumentos significativos de impuestos a productos de tabaco y lograr resultados en salud.

Revisión de una investigación in dependiente sobre contrabando demuestra que el impuesto al tabaco cumplió su objetivo en salud.

Desde el 20 de abril hemos observado en los medios la difusión de los resultados de un estudio sobre contrabando presentado por la ANDI. Este estudio plantea un panorama alarmante en las cifras de contrabando y en todas las notas de prensa se reitera el mensaje: el aumento de impuestos al cigarrillo es el causante del incremento en el contrabando y además no cumplió con sus objetivos de salud. Este diagnóstico está alejado del panorama que revelan los datos provenientes de fuentes independientes, que no tienen conflictos de interés frente a la medida de impuestos.

• En el marco de la política de aumento a los impuestos a los productos de tabaco hay tres factores que determinan su éxito: la reducción del consumo de cigarrillos, el aumento en los recaudos y el mantenimiento de niveles moderados de contrabando.

• Luego del aumento del impuesto de 700 pesos por cajetilla de 20 unidades en 2016 a 1400 pesos a partir de enero de 2017, ya es posible observar señales claras de logros en estos tres aspectos:

• Reducción de consumo: Número de fumadores adultos cayó de 3.3 millones a 2.8 entre 2016 y 2017 según la Encuesta de Calidad de Vida ü Recaudos del impuesto al consumo de productos de tabaco aumentaron alrededor de 46% en este periodo.
• El contrabando se mantiene en niveles moderados, según la medición de la Fundación Anáas (Deics Col): 3.5% del consumo en 2016 frente a 6.4% en 2017. La evaluación de impacto realizada por investigadores de la Universidad del Rosario concluye que el impuesto tuvo poca influencia en este resultado.

Así el país avanza hacia el logro de las metas de reducción de muertes prematuras asociadas con tabaquismo, que es el principal objetivo de la política de impuestos implementada con los recientes aumentos. Cabe aclarar que, contrario a lo que sugiere el titular de la noticia de Portafolio de mayo 3, el propósito del impuesto no es reducir el contrabando.

Cabe anotar que Deics-Col (el estudio de Anáas al que hace mención la nota de Portafolio) tiene un aval de calidad, puesto que ha sido publicado en una revista científica de primer nivel y utiliza las metodologías recomendadas por expertos para medir contrabando, incluyendo los manuales del Banco Mundial y actualizaciones posteriores de dichas herramientas de medición. La muestra de Deics-Col es representativa a nivel de ciudad e incluye una ciudad de frontera, Cúcuta, que efectivamente tiene un problema de contrabando, y una ciudad de la costa Caribe (Cartagena), en donde el contrabando se mantuvo estable. Los resultados indican que el factor determinante del comportamiento del contrabando no es el cambio en el impuesto, sino otras circunstancias, como debilidades en el control del territorio y distorsiones cambiarias.

La industria tabacalera acude a la divulgación de datos erróneos e incluso estudios científicos para influir en la opinión pública, y los sesgos en sus mediciones de contrabando son uno de los casos reportados por múltiples estudios internacionales (Link 1 y Link 2). Esta manera de gestionar la información es la razón por la que 19 escuelas de salud pública se comprometieron a no recibir financiación de la fundación de PMI para realizar investigación. Es claro el patrón de sobreestimar el tamaño del problema de contrabando en la mayoría de los estudios financiados por las tabacaleras cuando se comparan con estudios académicos, como se observa en el diagrama, y por tanto se requiere un cuidado especial en el manejo de las fuentes al tratar temas relacionados con la política de control de tabaco. Por ejemplo, acudiendo al principio de transparencia, los estudios deberían estar disponibles para el público, con una descripción de los protocolos para obtener las estimaciones.

Por último, llamamos la atención sobre la ausencia de discusión en estas notas de prensa de las cifras de consumo de cigarrillos, tanto de Deics-Col (Fundación Anáas) como de la Encuesta de Calidad de Vida (DANE), que muestran sin lugar a dudas la reducción en el consumo durante 2017, tanto por el menor número de fumadores como por la reducción en la intensidad del consumo de quienes continúan fumando. De habernos consultado a nosotros o a las autoridades que conocen estas fuentes, habríamos tenido oportunidad de entregar datos actualizados sobre tendencias del consumo, para que los medios ofrecieran una información integral a los lectores sobre los efectos de la medida. En atención al equilibrio informativo invitamos a los medios a consultar directamente con la Fundación Anáas y con los investigadores de la Universidad del Rosario más detalles sobre las características y resultados de nuestros estudios y a que presenten posiciones informadas de expertos en las notas relacionadas con estos temas.

Consultar aquí el artículo científico con los resultados Deics-Col 20164